Como buen hincha o fanático del fútbol, siempre esperé con ansias el pitazo inicial de un partido donde el protagonista principal es la Vinotinto, pero hoy, especialmente hoy, sé que toda Venezuela desea que el reloj acelere sus pasos y la noche se haga presente, hasta que sean las 8:15, hora en la que nuestra selección saltará al terreno de juego a disputar la semifinal de la Copa América ante Paraguay.
Luego de pasar de ser sorpresa a realidad, los venezolanos tienen una cita con la historia, pues disputarán por primera vez, como selección mayor, un encuentro tan crucial, el cual permitiría estar presente en una final y luchar por un título internacional. Claro, para esto, primero hay que derrotar a los guaraníes.
Para este choque, la Vinotinto no podrá contar con el mejor jugador de todo el torneo, Tomás Rincón. El tachirense vio un injusta tarjeta roja en el partido que ganó Venezuela a Chile 2-1 en los cuartos de final. Esa sería la única duda del director técnico César Farías de cara al compromiso de hoy, si colocar a Giácomo Di Giorgi o Luis Manuel Seijas como acompañante de Franklin Lucena en la doble contención.
Del resto, la motivación es importante para el partido de esta noche. La confianza en sí mismo y la seguridad en el trabajo del equipo, seguirá siendo fundamental en pro de seguir conquistando resultados que permitan alcanzar un sitio entre los monarcas de América. Hoy, nuestra Vinotinto tiene una cita, la historia nos espera.
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